mayo 31, 2010

No al burocratismo cambiario

Los controles cambiarios jamás servirán para detener las transacciones cambiarias, pues surgen mercados negros. Cualquier medida que implique control de cambios (ó regulaciones burocráticas cambiarias) va en contra del crecimiento económico. No a más burocratismo cambiario.

Muchas veces los agentes económicos son afectados en el intercambio de sus productos por las distintas regulaciones gubernamentales. Lo raro es cuando dichos agentes provocan el nacimiento de dichas regulaciones.
Tal es el caso de la semana pasada en que todos los bancos comerciales que operan en México acordaron suspender sus compras de dólares al menudeo. De acuerdo a sus argumentaciones, en los últimos días han enfrentado “entradas masivas” de dólares, lo que les hace pensar en que en medio de todo esto está el lavado de dinero. Por lo mismo, las autoridades han sido llamadas para “regular” dicha situación anómala.
No sé, pero me temo que ahora son los mismísimos bancos los que podrían provocar una regulación cambiaria más, que sólo encarecerá los costos de transacción de los agentes económicos.
De entrada, el hecho de enfrentar transacciones de dólares extraordinarias nada prueba que sea lavado de dinero. La economía mexicana (contrario a economías como la gringa) es muy pequeña como para que el lavado de dinero sea espectacular. Por supuesto, que lo hay, pero las regulaciones gubernamentales sólo complican las transacciones diarias. Los delincuentes siempre encontrarán la forma de burlar cualquier medida.
Ya por lo pronto la negativa de los bancos ha provocado que la enorme mayoría de la gente que realiza operaciones de dólares al menudeo (inocentes todas ellas) se vuelque a los centros cambiarios-negocios de cambio más pequeños-; colas enormes para vender dólares al menudeo.
Más vale que autoridades y bancos sean responsables y prudentes y no terminen por estimular la aparición de mercados negros (en dónde lo atractivo sería encontrar dólares más baratos).
La libertad económica incluye a la libertad cambiaria. Un régimen libre cambiario no mete restricciones de ninguna índole, y menos condiciona al escrutinio gubernamental el monto operado de intercambio. Además, en un régimen cambiario libre una persona puede tener cuentas bancarias en cualquier divisa ó metal precioso
.
Si empezamos a regular y regular por dizque combatir el lavado de dinero, vamos acabar en una dictadura cambiaria, en donde el gobierno sabe quién y cuanto opera en el intercambio de divisas. Vamos acabar fastidiando a, por ejemplo, los turistas, ó a pequeños comerciantes relacionados con la actividad turística.

Los narcos en una de esas y hasta ya poseen algún banco comercial, así que las regulaciones se las pasan por el arco del triunfo.
En México hemos avanzado en libertad cambiaria, la cual deberíamos mejorar y perfeccionar para tener un mercado de cambios verdaderamente libre (en donde por ejemplo, PEMEX pueda vender libremente sus dólares al mercado y no exclusivamente a través de Banco de México).
No sé que suceda esta semana en que la autoridad fijará una nueva circular para controlar supuestamente el lavado de dinero. Pero más vale no crear una regla monstruosa que origine mercados negros.
Cuando los gobiernos manejan mal la economía, imponen control de cambios (cosa también común entre las dictaduras comunistas), condicionan el abrir cuentas bancarias en divisas distintas, controlan la venta de oro y plata, etc. Los controles cambiarios jamás servirán para detener las transacciones cambiarias, pues surgen mercados negros. Cualquier medida que implique control de cambios (ó regulaciones burocráticas cambiarias) va en contra del crecimiento económico. No a más burocratismo cambiario. No hay que olvidarlo.

Por Godofredo Rivera.

Post RLB. Punto Politico.

Narco: cada quien por su lado + PRD: capitalizar acusaciones

La primera reacción del PRD ante el arresto de su candidato a gobernador para Quintana Roo, Greg Sánchez, no fue la de ofrecer pruebas de inocencia ni la de responder a las largas acusaciones contra el indiciado que se acumulan desde 2008, sino que prefirió usar las acusaciones como catapulta política para sacarle raja política en medios.

Se trata, ciertamente, del PRD que ha enarbolado la acusación de ineficacia de la política gubernamental de lucha contra el narco y que ha insistido en cambiar la estrategia aunque sin señalar hacia donde. Lo grave del asunto para el PRD fue que la orden de aprehensión contra Sánchez culminó la larga serie de señalamientos sobre presuntas vinculaciones del candidato con el crimen organizado.

Ahí es donde precisamente falla la estrategia gubernamental de lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado. La falta de consenso político se traduce en la mezquindad de los partidos hacia la política oficial. El PRD resume su política antidrogas en el argumento dialéctico de que se cumpla la lucha… en los bueyes de mi compadre.
Ahí se percibe también por qué el PRD no ha mostrado voluntad en la reforma del marco jurídico de la lucha contra el tráfico de drogas.

Lo malo para el PRD es que se jugará parte de su capital político en la defensa de un candidato marcado por las evidencias de vinculaciones con el crimen organizado. Mediáticamente quiso Jesús Ortega medrar con la compasión pública al colocar a la esposa de Greg como la vocera de la defensa del candidato, pero con el alto riesgo de que el proceso penal contra el indiciado se alargue, sigan apareciendo datos que confirmarían las acusaciones y que al final el acusado resulta efectivamente culpable.
El caso del PRD en Quintana Roo ilustra con claridad la falta de consenso en la lucha contra el narcotráfico. Desde el principio del proceso electoral local se filtraron datos de una investigación oficial, pero los desdeñaron direcciones del partido y de la coalición DIA. Peor aún: el PRD quiso capitalizar políticamente esos señalamientos como parte de una campaña mediática para posicionar a Greg en las encuestas. El PAN se negó a participar en la alianza en Quintana Roo precisamente por los indicios del expediente de indagación contra el alcalde con licencia del municipio de Benito Juárez.
La apuesta perredista ha sido muy alta y por tanto sus pérdidas pueden ser también mayores. La utilización de la esposa de Greg como vocera la ha colocado en el centro del escenario mediático pero también de la crítica. Como ella ha comenzado a hacer campaña por su marido, entonces tendrá que padecer también la crítica y las indagatorias. Y será peor si la PGR comienza a dar a conocer las evidencias en contra del indiciado.

Lo grave de todo es que el PRD sabía de las acusaciones y señalamientos en contra de Greg desde hace meses. Por tanto, la decisión política de convertirlo en su candidato llevaba implícita una apuesta riesgosa: o blindar a Greg y esperar que ganara las elecciones e hiciera un gobierno sin vinculaciones con el crimen organizado o haber tomado la decisión sin sensibilidad política y basado sólo en posicionamientos mediáticos. Los dos se convirtieron en graves errores políticos de Jesús Ortega y Manuel Camacho.

Ahora el PRD tiene que hacer esfuerzos desesperados por defender a Greg y esperar que las pruebas gubernamentales no sean tan contundentes porque el costo político de Greg también contaminará al PRD. De probarse sus vinculaciones con el crimen organizado, el PRD quedará marcado con la sospecha de las razones que lo habría llevado a escoger como candidato a un personaje cuyas vinculaciones con las mafias habían circulado en medios, con datos y señales, desde mediados de 2008.

El golpe también alcanzará al PAN por sus alianzas en Oaxaca, Puebla y Durango. Y no porque ahí hubiera la reproducción del caso Quintana Roo, sino porque el PRD ha resentido un duro golpe de credibilidad en Quintana Roo y por tanto sería un partido nada confiable. Por tanto, el PAN está obligado no sólo a no sumarse a la loca carrera desesperada del PRD para desviar la atención del caso Quintana Roo, sino a replantear sus alianzas. Paradójicamente el PRD acusó al gobernador de Durango con la misma ligereza que dice que la PGR señaló al candidato perredista en Quintana Roo.

La crisis del PRD en Quintana Roo debe obligar al partido a una revisión no sólo de sus estrategias electorales sino de su política legislativa en materia de seguridad pública. Porque el caso Greg podría dejar la sospecha de que el PRD regatea reformas y critica la estrategia del gobierno por el hecho de haber promovido la nominación de un empresario y político señalado por las autoridades penales de tener vinculaciones con el crimen organizado. El PRD seriamente no puede caer en el papel infantil de denunciar la persecución contra Greg porque iba a ganar las elecciones de gobernador, porque en realidad iba abajo en las encuestas y no habían razones verdaderas para suponer el triunfo.

Lo que el PRD en el caso Quintana Roo se juega no es un número de votos sino su credibilidad política en materia de relaciones con el crimen organizado
Por Carlos Ramirez.
Post RLB. Punto Politico.

mayo 27, 2010

¿Suicidio penal o político? + Nulidad de pesquisa Bazbaz

La auto renuncia de Alberto Bazbaz Sacal al cargo de procurador de justicia del Estado de México no cerró el caso Paulette. Al contrario, hay confesión de parte de errores, irregularidades y deficiencias con suficiente fuerza jurídica como para declarar la nulidad de las conclusiones. Por tanto, en nuevo procurador está obligado a reponer la averiguación previa.
De otra manera, la auto renuncia de Bazbaz a la procuraduría mexiquense podría ser considerada como una maniobra leguleya para cerrar el caso Paulette con la certeza de que hubo vicios de origen. En derecho, el enviciamiento de una indagatoria pervierte la conclusión. Por tanto, para hacer justicia es necesario que una nueva autoridad realice otra investigación sobre la muerte de la niña.
La lógica jurídica es implacable: los errores en la integración de la investigación y la averiguación previa obligadamente derivan en una conclusión pervertida. Los vicios de origen se convierten en vicios de conclusión. Y con ello se pierde la certeza del acto jurídico y de la aplicación de la ley como acto de justicia. Por tanto, el primer interesado en reponer la investigación para podar errores en investigación y conclusiones sería el gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto, a riesgo de cargar con el asunto como un fardo político en su carrera por la candidatura presidencial del PRI para el 2012.
Las dudas sobre la investigación y conclusiones de muerte accidental fueron confirmadas por el propio Bazbaz en su breve declaración de anuncio de su auto renuncia al cargo de procurador: “para que una Procuraduría pueda realizar sus funciones con eficacia es indispensable que cuente con la confianza, la credibilidad y el respaldo de la gente a la que sirve, cuando esto se pierde, resulta imposible cumplir la responsabilidad”. Ahí se encuentran los elementos de descrédito de la investigación.
En la investigación, Bazbaz cometió otro error jurídico que violó los derechos de inocencia de los presuntos inculpados. Públicamente afirmó que se trataba de un homicidio y decretó el arraigo de los padres, además de incriminar a las nanas y acusar a la madre. Esa decir, Bazbaz presentó primero las conclusiones y después realizó la investigación. Lo paradójico fue que la investigación procesal lo llevó a otra conclusión.
El descrédito de la investigación radicó no sólo en el hecho de hacer primero las incriminaciones y luego las investigaciones y conclusiones, sino en la aceptación de errores y sobre todo la admisión de que la sociedad le perdió la confianza a la procuraduría mexiquense. A partir de ahora, si se consolida la investigación de Bazbaz, cualquier presunto delincuente podrá invocar el proceso Paulette para impugnar acusaciones.
Se trataría de una variante de la “teoría del fruto del árbol envenenado” que se utiliza en derecho para decretar automáticamente la nulidad de un proceso cuando se estima “cualquier prueba obtenida con violación de derechos fundamentales”. Hasta ahora sólo se tienen afirmaciones del propio jefe del ministerio público de que hubo errores, irregularidades y deficiencias, aunque sin aclarar con precisión los casos concretos. De todos modos, la conclusión de accidente de la indagatoria Bazbaz fue producto del árbol envenenado de un proceso de investigación irregular. Es decir, no puede haber conclusiones legales como producto de una investigación con defectos.
De la investigación de Bazbaz se desprenden cuando menos tres dudas razonables, otro principio del derecho que tiene valor judicial:

--El hecho de que un cadáver permanezca en una habitación nueve días sin emitir olor alguno y que en la habitación, presunta escena del crimen, hayan dormido en esos mismos días varias personas. Además, la habitación fue revisada por peritos.
--La declaración de las nanas de que ellas revisaron minuciosamente la cama removiendo las sábanas sin que hubiera algún indició del cadáver de Paulette. De pronto, inopinadamente, el cadáver apareció.
--El arraigo a los padres de Paulette fue hecho bajo la declaración del propio procurador de que Paulette había sido asesinada. Bazbaz usó la palabra homicidio.

Lo malo para las autoridades del Estado de México radica en el hecho de que la indagatoria se pervirtió procesalmente y que el procurador dictaminó resultados antes de terminar la investigación, que cualquier otra conclusión que no determine el homicidio será desautorizada por la opinión pública.
Pero aún así, el gobernador Peña Nieto necesita, para control de daños de su propia posición política como precandidato presidencial priísta y como jefe del ejecutivo estatal, que exista otra indagatoria realizada sin errores, deficiencias e irregularidades, sobre todo porque apenas el lunes avaló el reporte final del caso que el propio Bazbaz dijo que había tenido fallas procesales. Asimismo, la credibilidad del nuevo procurador va a depender de que despeje las dudas heredadas por Bazbaz.
Al final de cuentas, el contexto político del caso Paulette no sólo involucra a una niña menor de edad con facultades limitadas sino que incorporó al escenario al principal precandidato del PRI a la presidencia de la república. La única forma de hacerle justicia a Paulette radica en una nueva investigación que llegue a conclusiones sin ninguna duda razonable.

Por Carlos Ramirez

Post RLB.Punto Politico

mayo 25, 2010

Bazbaz, un caso para la Araña + De cómo el viejo régimen sigue

Entre los principios de derecho hay uno que define la credibilidad de los resultados y del valor de la ley: si el proceso es viciado, sus conclusiones por tanto también serán viciadas. Al reconocer que hubo errores en el proceso de investigación del caso de la niña Paulette, el procurador mexiquense Alberto Bazbaz violó los principios del derecho al presentar conclusiones válidas sobre errores procesales. Con errores, la justicia no es justicia.
Pero el asunto, en realidad, es menos jurídico y muchísimo más político. Si el gobernador Enrique Peña Nieto no fuera el principal precandidato presidencial priísta, el asunto Paulette lamentablemente no hubiera tenido el valor que le otorgaron los medios. El cariz mediático ha podido revelar los estilos políticos de hacer derecho del viejo régimen priísta que quiere regresar a la presidencia de la república.
Por tanto, lo importante del caso Paulette-Bazbaz no fue el derecho, la justicia, la muerte sospechosa de una niña con capacidades mermadas, el abuso de familia, la vigencia del sistema priísta, la politización de la impartición de justicia y la decisión gubernamental mexiquense de desdeñar el sentido común y la inteligencia de los ciudadanos. Lo realmente valioso era sostener a Bazbaz en el cargo como una forma de no ceder posiciones pre-presidenciales del gobernador Peña Nieto.
Lo demás… fue lo de menos, aunque al final los análisis y reacciones al informe final del carpetazo del caso Paulette dejaron los primeros indicios de acreditación de responsabilidad no a un procurador que cambió de tesis --del homicidio al… ¿auto suicidio?-- y siguió tan campante defendiendo víctimas, sino a un precandidato presidencial que puso por delante su espacio de poder pero por el camino de la violación del Estado de derecho. Así, el gobernador mexiquense le dio más valor al cargo de Bazbaz como procurador que al sentimiento nacional de escepticismo --para decir lo menos-- sobre la niña Paulette.
No sería un caso inédito. En 1994, el entonces fiscal especial del caso Colosio, Miguel Montes, dio su primer informe a partir del criterio oficial de que se había tratado de un homicidio premeditado --“acción concertada”, dijo con claridad-- y luego, presionado por el presidente Carlos Salinas, cambió su tesis a la de asesino solitario. Bazbaz hizo lo mismo: primero afirmó que se trataba de un homicidio y luego dijo que siempre no. Por tanto, los casos quedaron contaminados.
Lo grave del Estado de derecho que ahora representa Bazbaz radica en el hecho de que se pueden cometer errores de procedimiento y de investigación y aún así imponer el resultado final. Por tanto, lo que quedó hecho polvo en el Estado de México fue el Estado de derecho. El reconocimiento de errores en la indagatoria procesal debió de haber llevado a la autoridad estatal a cambiar a los responsables de la investigación. Pero resultó que el mismo funcionario que cometió los errores para determinar homicidio fue el encargado de llegar a la conclusión de accidente.
Lo más grave del asunto es que Bazbaz como procurador es al mismo tiempo el defensor de la víctima como ministerio público. Y para que no hubiera dudas, Bazbaz dijo textualmente: “asumo, por supuesto, plenamente la responsabilidad institucional y personal que me corresponde como cabeza de este ministerio público por las citadas deficiencias”. Pero no se trataron de errores menores, sino de equivocaciones en una investigación criminal.

Y para que no hubiera duda de la disociación entre el sentimiento social y los compromisos políticos, hace menos de veinte días Bazbaz asumió la presidencia del Órgano Rector del Sistema Integral de Protección a Víctimas del Delito del Estado de México. Si el Ministerio público es el defensor de las víctimas, ese organismo quedó ya marcado por la designación de un funcionario que cometió errores graves en la defensa de las víctimas. Pobres víctimas si Bazbaz las va a defender igual a como procesó a la víctima Paulette.

Lo paradójico del asunto podría ser el hecho de que existe la posibilidad de que el caso Paulette hubiera ocurrido como señala el informe final. Pero el descrédito del procurador Bazbaz dejará el caso como una mancha más al tigre de la impartición de justicia del sistema judicial del régimen priísta mexiquense. Y como para que no haya duda de la politización del asunto, la oposición prepara movimientos para mantener vivo el caso Paulette como un caso de poder y no de justicia y con ello acreditar el asunto a la precampaña presidencial del gobernador Peña Nieto.
Lo que queda es enfocar el caso Paulette como un asunto de derechos humanos, por cierto bastante relajados en el gobierno mexiquense. Una investigación llevada a cabo con errores reconocidos por el fiscal implicaría la violación de los derechos humanos de la víctima. A favor de Bazbaz corre el hecho de que los padres de Paulette, señalados como presuntos responsables de la muerte, son ahora sus principales aliados. Sin embargo, más fuerte que las complicidades es el valor del peso de la opinión pública y ahí ya lleva bastantes pérdidas el gobernador Peña Nieto.

Por Carlos Ramirez.

Post RLB. Punto Politico.

mayo 18, 2010

Diego: mensaje para el 2012 + Crisis por falta de transición

En medio de un sinnúmero de hipótesis planteadas en los medios, el caso de Diego Fernández de Cevallos se localiza en el espacio de una sola certeza: las crisis políticas suelen provocar rupturas en los sistemas políticos cerrados.
La lista de sucesos similares ayuda a la comprensión de la crisis política actual.
1.- El secuestro del suegro del presidente Luis Echeverría inició el conflicto de ruptura con los empresarios y modificó la sucesión presidencial de 1976.
2.- El intento de secuestro de Margarita López Portillo, hermana del entonces presidente electo José López Portillo, determinó una lucha por el poder en las élites, azuzadas por el aumento de la guerrilla.
3.- Los asesinatos del columnista Manuel Buendía en 1984 y del agente antinarcóticos estadunidense Enrique Camarena en 1985 por el asunto del narco fueron producto del intervencionismo estadunidense que decidió la sucesión presidencial de 1988.
4.- Los asesinatos del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo y del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio cambiaron el sentido de la sucesión presidencial de 1994.
5.- El secuestro espectacular de Fernando Gutiérrez Barrios, también producto de una disputa violenta en las élites, fue el preludio de la alternancia. Liberado, Gutiérrez Barrios fue el encargado del proceso de selección del candidato presidencial priísta que perdió las elecciones.

En este contexto, el presunto secuestro de Diego Fernández de Cevallos tiene un contexto muy especial:
1.- La guerra contra las drogas y el arresto y casi inmediata liberación de la esposa de Joaquín El Chapo Guzmán Loera. A ello se agrega el dato de la influencia de Diego en la designación del equipo de seguridad del gobierno federal.
2.- El papel de Diego en el grupo político del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, ahora de regreso para impulsar al PRI en la recuperación de la presidencia de la república. Diego estaría en la lógica de mantener al PAN en la presidencia.
3.- La circulación del nombre de Diego como candidato presidencial del PAN en el 2012 como el único panista capaz de mantener la presidencia en poder del PAN y evitar el regreso del PRI.
4.- El proceso de designación de consejeros nacionales del PAN como el camino para establecer el grupo dominante que tendría a su cargo la designación del candidato presidencial panista para el 2012.
5.- La incapacidad de los gobiernos panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón para impulsar la verdadera transición mexicana a la democracia y la construcción de instituciones democráticas.

A ello se agrega un escenario inédito: ¿por qué el gobierno de Fox no enfrentó un escenario de confrontación violenta? Porque decidió no romper con el PRI y porque el PRI llegó fracturado a la definición de su candidato presidencial. Calderón, en cambio, tomó la determinación de combatir a las mafias del narcotráfico que ya se habían incrustado en instancias institucionales del viejo régimen priísta. Ahí Calderón tocó nervios sensibles: la persistencia de viejos pactos del PRI con estructuras paralelas del crimen organizado. De ahí la respuesta violenta de las mafias, la falta de solidaridad del PRI legislativo y el escenario de debilidad política de Calderón.

El desafío del presidente Calderón es similar al que enfrentó Salinas con el tratado de comercio libre y la liberación de fuerzas sociales: las cinco crisis de toda transición sin plan de vuelo y sin acuerdo plural.
1.- La inestabilidad: cuando las estructuras del sistema político son incapaces de canalizar movilizaciones radicales.
2.- La desestabilización: cuando el sistema político es afectado por organizaciones de fuera del mismo régimen.
3.- La ingobernabilidad: cuando las ofertas de modernización institucional son menores a las demandas de grupos radicales de todo tipo.
4.- El vacío de poder: cuando las estructuras de gobierno quedan paralizadas por falta de reglas o iniciativas de adecuación de demandas.
5.- La restauración del viejo orden: cuando la sociedad decide interrumpir la experiencia de la alternancia y opta por regresar al partido anterior.

La situación actual de México es bastante parecida a la vivida en el país en los sexenios de Echeverría, López Portillo, De la Madrid, Salinas y Zedillo y que plantearon un deterioro progresivo de la capacidad política para gobernar, además de la pérdida de la iniciativa política de los gobiernos, la polarización de la sociedad y la ausencia de acuerdos de gobernabilidad con los grupos radicales. Si en esos años la salida inducida fue la alternancia partidista en la presidencia de la república, ahora la falta de un proyecto de transición pactada a un nuevo régimen y a otro sistema político lleva las contradicciones a la restauración del viejo orden.

Lamentablemente, ahora lo de menos es Diego Fernández de Cevallos. Diego sería el Aldo Moro mexicano: el pretexto de una crisis. El problema radica es ver si el gobierno de Calderón va a optar por la transición pactada o reproducirá el fenómeno político que llevó al PRI a la derrota.

Por Carlos Ramirez.

Post RLB. Punto Politico.

mayo 16, 2010

Regresa terrorismo con Obama + Y se tambalea Janet Napolitano

Después del intento de hacer estallar un avión en Detroit, ahora los Estados Unidos se estremecieron con un auto explosivo en pleno Times Square de Nueva York.

Los dos intentos de agresión fracasaron, pero dejaron un mensaje muy claro: el terrorismo árabe volvió a meterse en los Estados Unidos para mezclarse con la resistencia social interna al gobierno de Obama.
El tema es el más serio que consideran algunos analistas estadunidenses. Y la atención se ha centrado en la ineficacia de la Secretaría de Seguridad Interior, cuya titular Janet Napolitano, ex gobernadora demócrata de Arizona, ha sido desbordada por varias expresiones de inseguridad territorial. Agobiada por la violencia del narco, la violencia del terrorismo y la violencia de la pobreza transformada en inseguridad, la señora Napolitano es presionada para su relevo.

La situación interna en los EU atraviesa por su peor fase. Los análisis sobre la rebelión migratoria en Arizona no se contentan con los argumentos nacionalistas o de tolerancia, sino que advierten la conformación de una poderosa red de resistencia social de opositores ideológicos a Obama, pero no por ello menos peligrosos. Hace varias semanas hubo un incidente que dejó indicios de desintegración nacional: una manifestación de gente armada en Virginia, demasiado cerca de Washington, protestando contra lo que llamaron la tiranía del gobierno de Obama.

La ola de agresiones contra los migrantes expondría algunas de las debilidades del gobierno de Obama: la imposibilidad práctica para sacar en el corto plazo o en su primer cuatrienio una reforma migratoria, porque necesitaría del apoyo de los reacios republicanos, aunque de nueva cuenta Obama se comprometió a avanzar; la conformación de un bloque conservador que estaría en posibilidades de frenar cualquier otra reforma de Obama que pusiera en el tapete de las discusiones mayores atribuciones para el gobierno y para el Estado; y el discurso político de los republicanos de que Obama estaría en condiciones de decretar una suspensión de garantías.

El problema se localiza en la Secretaría de Seguridad Interior, a cuya titular Janet Napolitano la acusan de investigar más a grupos locales disidentes que nada tienen que ver con el terrorismo, mientras el grupo Al Qaeda sigue fortaleciéndose localmente. Varios medios han denunciado que Napolitano autorizó espionaje contra grupos opositores a la reforma de salud y a grupos de veteranos descontentos, que a desarrollar políticas contra el terrorismo.

Inclusive, acusan a Napolitano de ser más dura contra los que portan las banderas amarillas de Gadsden, cuyo mensaje confuso tiene que ver con la historia basada en la serpiente de cascabel: no ataca sino cuando la molestan. Cada día aumentan las exhibiciones de autos y casas con esa bandera amarilla, con el temor de que se conforme un grupo de resistencia dispuesto a pasar a la acción.
En el tema del narcotráfico los saldos de la señora Napolitano son negativos: la frontera de los EU con México está cada vez más vulnerada por las organizaciones que contrabandean personas, droga, dinero y armas. Sin poder contener la penetración del terrorismo, las evaluaciones de inteligencia del Departamento de Justicia de los EU revelan que todos los estados de la Unión Americana tienen en su interior pandillas que controlan el mercado de droga y que responden ya a los cárteles mexicanos de la droga.

Hasta ahora, las autoridades estadunidenses no tienen una explicación respecto a la reactivación de la actividad de organizaciones radicales árabes dentro de los EU. El intento de atentado hace unos días con un coche bomba estacionado en pleno Times Square volvió locas las alarmas de violencia en el gobierno de Obama. El auto fue descubierto a tiempo y la indagación finalmente llegó a organizaciones árabes terroristas de Al Qaeda.
Para algunos analistas, la reactivación de las expresiones terroristas está vinculada con el relajamiento de las políticas de seguridad interior y sobre todo con la disminución de detenidos en la prisión de Guantánamo. Los presos que han sido liberados por procesos viciados muy pronto fueron detectados de regreso a organizaciones terroristas árabes.

De ahí que la seguridad interior de los EU se encuentre atrapada entre dos fuegos: la conformación de una resistencia activa y armada en el interior --vía los republicanos radicales que se oponen a las reformas de Obama, los grupos radicales antiinmigrantes, los defensores de la portación de armas, los Tea Party y los pobres que no reciben ayuda oficial-- y la reactivación del terrorismo dentro del territorio estadunidense. George W. Bush había convertido Irak y Afganistán en un desafío al terrorismo en su territorio para alejarlo de los EU, pero el repliegue de Obama de esos países ha tenido el efecto inmediato de reactivar la penetración del terrorismo en los Estados Unidos.
El problema de fondo es que el gobierno de Obama está preocupado por el terrorismo pero no lo asocia con un debilitamiento de la política militar de los EU en el oriente árabe. Pero ya van dos mensajes de Al Qaeda con la clara intención de asesinar estadunidenses dentro de los Estados Unidos. Y en cualquier momento pueden ocurrir otros más.
Por Carlos Ramirez
Post RLB.Punto Politico.

Mario Villanueva: narco Cuba + Fidel y Raúl estaban enterados

La extradición del ex gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva, a los Estados Unidos ha comenzado a causar inquietudes en el gobierno cubano de los hermanos Castro porque va a reabrir el delicado tema del narcotráfico en Cuba avalado por los altos jefes de la revolución.
La vertiente cubana del caso Villanueva reabriría los expedientes del general Arnaldo Ochoa y los hermanos la Guardia, fusilados bajo cargos de haber traicionado a la Revolución Cubana. Pero ellos --y otros altos cargos de la élite castrista-- formaban parte de la red de tráfico de drogas de Cuba. Y como vinculación latente estaba la relación orgánica de Fidel Castro con el entonces hombre fuerte de Panamá, Manuel Antonio Noriega, encarcelado en los EU por tráfico de drogas y apenas extraditado a Francia.
Villanueva era considerado en Cuba como el contacto mexicano de las altas esferas cubanas. La Isla de Cuba se localiza en el camino para la distribución de la droga procedente de Colombia y ahora de Venezuela. En 1999, Villanueva mantenía relaciones estrechas con el entonces canciller de Cuba, Roberto Robaina, al grado de que la remodelación de la cancillería había sido realizada con dinero aportado por Villanueva. Los datos políticos señalan que la relación Robaina-Villanueva había sido aprobada por Fidel y Raúl Castro.
Cuando se abrió el megaproceso contra Villanueva en México, por presión de los Estados Unidos y la aprobación del presidente Zedillo, Cuba decidió rápidamente romper la vinculación oficial con el gobernador quintanarroense y el canciller Robaina fue abruptamente cesado bajo la acusación de haber traicionado a la Revolución, presentarse como el “heredero” de Fidel Castro y “pactar” una transición política cubana hacia el capitalismo. Sin embargo, no hubo ninguna prueba.
Tres años después, Robaina fue echado de todas las instancias del partido y colocado en el puesto menor. En el 2002 el escritor Carlos Alberto Montaner reveló que en Cuba han “exhumado su cadáver (político) con el objeto de volver a liquidarlo. ¿Qué ha pasado? Muy sencillo: el ex gobernador mexicano de Quintana Roo, Mario Villanueva, preso por narcotráfico y otros delitos graves, probablemente será extraditado (y lo fue ocho años después) a los EU y saldrán a la luz pública sus relaciones con el gobierno cubano y su paso nada honroso por la isla. Castro quiere tener listo su chivo expiatorio y quien mejor que Robertico Robaina, amigo de Villanueva, para ser culpado de esos vínculos delictivos”.
El proceso de extradición de Villanueva a los Estados Unidos en 2002 no pudo concretarse por cuestiones legales que ganó el ex gobernador quintanarroense. De todos modos, en previsión de conflictos por venir, Fidel Castro expulsó a Robaina del Partido Comunista y lo dejó en el vacío político de un régimen comunista que puede ser más doloroso y dañino que la cárcel.
El estilo político de Fidel Castro es de sobra conocido. En 1989 se deshizo del general Arnaldo Ochoa y de los dos hermanos la Guardia --los tres amigos personales de Raúl Castro-- bajo los mismos cargos de conspirar contra la Revolución; es decir, crecer personalmente en apoyo popular y opacar la estrella del caudillo de la Sierra Maestra. Pero los hermanos la Guardia participaban en el tráfico de productos para allegarle divisas al gobierno cubano. Y lo hacían con el aval de Fidel y Raúl Castro. Entre los productos de contrabando se incluía la cocaína procedente de Colombia rumbo a los EU. Antes de que estallara el conflicto, Fidel Castro fusiló a Ochoa, al coronel Antonio la Guardia y a otros militares.
La relación de Villanueva con Robaina tenía el beneplácito de los hermanos Castro. Inclusive, ya en plena huida y aún con el cargo de gobernador de Quintana Roo, la policía temía que Villanueva se refugiara en Cuba. Las versiones hablaban de 25 mil dólares entregados por Villanueva a Robaina para la remodelación del edificio de la cancillería en La Habana. Pero además, existen indicios de que hubo otras entregas de dinero en efectivo y cheques de Villanueva a Robaina, además de acusaciones de que Robaina utilizaba el avión oficial del gobierno de Quintana Roo para viajes por la zona. Todos estos datos eran conocidos por Fidel Castro pero se usaron en contra de Robaina cuando arrestaron a Villanueva.
La extradición de Villanueva ha regresado el nerviosismo a Cuba, sobre todo por el interés del gobierno de Obama de replantear la relación y por las decisiones para ampliar el aislamiento de La Habana. De todos modos, Cuba sigue apareciendo en las rutas del narcotráfico en el Caribe y más ahora que Venezuela se ha convertido en uno de los países trampolín de la droga y del lavado de dinero del narcotráfico.
Como los EU controlan el flujo de droga y el lavado, en consecuencia están en poder de suficiente información criminal sobre el papel de Venezuela y Cuba en el tráfico de droga. Villanueva está acusado de permitir el uso de su estado para el trasiego de substancias prohibidas y cobrar por ello. Si el asunto va a fondo y toca el punto del tráfico --y no nada más el del cobro por derecho de paso--, entonces Cuba va a volver a colocarse en el centro del conflicto mundial: un comunismo articulado al narcotráfico.
Y a los Castro se le aparecerán los fantasmas de Arnaldo Ochoa y Tony la Guardia y Noriega.

Por Carlos Ramirez
Post RLB. Punto Politico.

Alianzas: razones del fracaso + Gordillo y APPO las infectaron

El principal problema de las alianzas PAN-PRD en elecciones de gobernador radicó en la venta de falsas expectativas.
Y como se presentan las cosas, los promotores de las alianzas aún no asimilan la derrota prevista en las encuestas, a riesgo de llevar las elecciones estatales a situaciones de violencia que desvíen la atención de las derrotas.

La política mexicana es bastante previsible. Y los casos de Oaxaca y Puebla podrían ser un buen laboratorio para el análisis político de las posibilidades de las alianzas PAN-PRD en el 2010 y con vistas a la posible alianza electoral para las presidenciales del 2012 para enfrentar a un PRI bastante adelantado.

El principal error de los estrategas de las alianzas fue suponer que la suma automática de los porcentajes de la oposición daba la ventaja inicial. Y no ha sido así. Hay inclusive datos de que el PAN y el PRD habrán de perder votos al acudir unidos. El segundo error estratégico fue no alcanzar a explicar bien las razones de la unión y ahogarse en los ataques al PRI. Y el tercer error estratégico se localizó en la falta de unidad de la oposición, pues la rebeldía de Andrés Manuel López Obrador hizo perder el efecto sicológico de la unión opositora.

Las candidaturas aliancistas no han sabido explicar las razones de sus nominaciones. Su énfasis en el cambio, la alternancia y la ética chocan de frente con sus propias representatividades. Gabino Cué en Oaxaca y Rafael Moreno Valle en Puebla representan los intereses de políticos del pasado priísta reciente que tienen pasivos --para decir lo menos-- en la entidad: Cué va a restaurar los cacicazgos de Diódoro Carrasco, José Murat y López Obrador. Y Moreno Valle en es el candidato de Elba Esther Gordillo, la cacique sindical que encarna hoy en día al México del pasado y que representa lo peor del corporativismo-rémora del pasado priísta.

La ubicación de los candidatos aliancistas abajo del candidato del PRI puede explicarse por diez razones:

1.- La ciudadanía no percibió un cambio político de fondo en las candidaturas de coalición. El perfil priísta de los candidatos aliancistas se convirtió en un lastre.

2.- La alianza se basó en una tendencia estimulada artificialmente de polarización política, luego de que la ciudadanía no ha tenido ningún beneficio con esa división. Las crisis en Oaxaca y Puebla mostraron la insurrección del PRD ante la capacidad de resistencia del PRI. Los ciudadanos no quieren conflicto sino transiciones ordenadas.

3.- El impacto de una unión opositora se perdió con el juego político de López Obrador y su tendencia a dividir a la oposición. El tabasqueño no se sumó a la unión sino que se movió para sus propios intereses. Al final, López Obrador --como siempre-- le hizo el juego sucio al PRI.

4.- Las alianzas desdeñaron el factor local: el buen posicionamiento político de los gobernadores salientes. Y Manuel Camacho como politólogo debió de entender que la gente vota en función del periodo anterior. En las crisis de Puebla y Oaxaca, los gobernadores se fortalecieron localmente, mientras sus opositores armaron una insurrección en el DF.

5.- Los aliancistas han confundido el DF con la plaza local. El lenguaje de violencia política molesta a los electores que votarán por su mandatario estatal. A ello se ha agregado el hecho de que los candidatos Gabino Cué y Rafael Moreno Valle llegan por la venganza, no para ofertar un cambio. Más que una alternancia, la oposición propone una ruptura violenta.

6.- La ausencia del gobierno federal dejó la plaza bajo el dominio de los gobernadores priístas. Y los aliancistas representan al PAN ausente y al PRD violento, no una oferta de estabilidad y desarrollo. El presidente de la república ha carecido de una estrategia de fortalecimiento de su figura --y la de su partido-- en los estados gobernados por el PRI.

7.- La alianza desdeñó un factor determinante: la identidad partidista. El PRI trabajó la lealtad, en tanto que el PAN y el PRD sufrieron divisiones ad infinítum. En todas las encuestas aparece la identidad partidista como uno de los elementos de lealtad en el voto. La oposición perdió sus bases y el PRI fortaleció sus espacios tradicionales.

8.- El PRI ha ofertado la continuidad de una política que ha beneficiado a los ciudadanos --política asistencialista--, en tanto que la alianza propone una ruptura radical como sinónimo de violencia y de exclusión. La oposición no ha analizado si las sociedades de Oaxaca y Puebla quieren la alternancia o la continuidad.

9.- La oposición como partido carece de fuerza estructural. El PRI, en cambio, ha privilegiado un partido fuerte con su estructura electoral como globo y ancla. Al final, la clave se localiza en la estructura electoral para el aseguramiento del voto. Las encuestas revelan que la oposición depende del voto de castigo y del voto de los indecisos.

10.- El PRI ha desarrollado una campaña basada en la atención a los ciudadanos, en tanto que los candidatos aliancistas se han inclinado por satisfacer al círculo rojo de la crítica y la confrontación. Ahí se ha dirimido una buena parte del voto.

Los casos de Oaxaca y Puebla ilustran que las alianzas carecieron de una estrategia de fondo.

Por Carlos Ramirez.
Post RLB. Punto Politico.

mayo 14, 2010

La cubanización de Venezuela

Es importante comprender exactamente qué significa la llamada “cubanización” de Venezuela. Es un proceso por el que los mismos cubanos pasaron. Se trata del establecimiento del estado totalitario. El papel que están jugando los cubanos en Venezuela es el mismo que los soviéticos jugaron en Cuba. Tras el triunfo de la revolución en 1959.

Castro tenía el control absoluto de Cuba puesto que el ejército nacional había sido prácticamente disuelto y sustituido por los mandos castristas. Y el ejército, por supuesto, es la columna vertebral de la república. Todos los sofisticados mecanismos de la democracia dependen del aparato que los protege, y ese aparato es el ejército. Ahora bien, el estado es un vasto organismo de gran complejidad y, en los países democráticos, diseñado para defender las libertades individuales, la esencia misma del sistema.

Fue por eso que, a partir de fines de los años 60, Castro recurrió a un verdadero ejército civil de funcionarios soviéticos para que lo ayudaran a construir un nuevo tipo de estado: un estado totalitario, donde todas las libertades individuales estuvieran subordinadas al estado y al gobierno. Y eso es, fundamentalmente, lo que están haciendo los cubanos en Venezuela. Actualmente, funcionarios cubanos ocupan altos cargos en las fuerzas armadas, el Ministerio de Defensa, Interior y Justicia. Hay cubanos en los servicios de inteligencia nacional venezolana y en la policía nacional de reciente creación. Pero, además, funcionarios cubanos ocupan puestos claves en los registros nacionales del país, en el Seniat (impuestos), Onidex (identidad nacional, pasaporte y control de la migración), Pdvsa, Cantv y Corpoelec.

Chávez inclusive quiere copiar el modelo cubano de total reorganización administrativa, pretende eliminar los gobiernos municipales y regionales (electos) y sustituirlos por nuevas entidades “bolivarianas” que estarían controladas por una comisión central presidida por Chávez.

Con el mismo objetivo está pensando suprimir los actuales límites territoriales entre los estados y crear nuevos estados con nuevos nombres, lo mismo que hizo Castro con las provincias cubanas.

La misión fundamental de los cubanos, por supuesto, es conseguir el control absoluto de las fuerzas armadas. A los ojos de Fidel Castro, el principal problema de Chávez es que no puede confiar en sus fuerzas armadas puesto que, en lo fundamental, éstas siguen siendo las mismas de la república democrática venezolana. Apoyado en sus enormes recursos financieros, Chávez ha comprado los mandos, los ha sobornado y los ha llenado de prebendas, pero nunca puede considerarlos totalmente suyos porque todos existían antes de él y pudieran seguir existiendo después de él.

Por otra parte, son unas fuerzas armadas permeadas, de arriba abajo, por el espíritu democrático y liberal de la república. En última instancia, eso es inadmisible. A lo que Castro y Chávez aspiran es a un sistema donde el dictador pueda tomar al militar más prestigioso del país como era el general Arnaldo Ochoa, Héroe de la República de Cuba, y fusilarlo sin que nadie se atreva a objetar. Sería suicida para los militares venezolanos olvidar que ese es el modelo de Chávez.

Chávez cree tener comprado al gobierno cubano porque desde el año 2000 le ha estado dando a Cuba unos $5,000 millones al año en petróleo además de dinero en efectivo, en conjunto alrededor de $50,000 millones en recursos del pueblo venezolano.

En esto se equivoca profundamente. Los Castro no se consideran deudores de Chávez, todo lo contrario, piensan que es Chávez el que tiene que agradecerles poder mantenerse en el poder.

Y no sólo eso. Es perfectamente posible que los cubanos puedan llegar a tener el verdadero control del país y, por extraño y paradójico que parezca, convertir a Venezuela es una especie de semi-colonia cubana donde todas las decisiones realmente importantes se tomen en La Habana. El que considere irrisoria esta afirmación no comprende a Castro ni la magnitud de su ambición.

No es por gusto que Ramiro Valdés, el tercer hombre de la revolución cubana, se ha establecido en Venezuela.En su desprecio real por el pueblo venezolano, Chávez ha convertido a Venezuela en un importante aliado de la teocracia iraní.

Es increíble. El pueblo venezolano es cristiano y católico. ¿Qué posible afinidad puede tener con una dictadura extremista musulmana donde las mujeres son ciudadanas de tercera categoría? Un país violentamente antisemita, que dice querer barrer a Israel de la faz de la Tierra y que se ha embarcado en un programa de fabricación de armas nucleares rechazado, de plano, no sólo por Estados Unidos sino por Inglaterra, Francia, Alemania, Italia, toda la Unión Europea y la gran mayoría de las naciones del mundo.

El pueblo cubano no podía luchar contra la invasión soviética porque ya se había instalado la dictadura y no tenía forma de hacerlo. Los venezolanos tienen muchas más posibilidades. Puede arrancarle, inclusive, el total control del Congreso que, en un colosal error político, le entregaron en bandeja de plata. Es una posibilidad totalmente real pero que exige una gran concentración de recursos y esfuerzos.

Los venezolanos pueden hacerlo. La alternativa es aceptar la dictadura y perder el país para siempre.

Por Adolfo Rivera Caro.

post RLB. Punto Politico.

mayo 03, 2010

Un virus llamado Maciel

Se descargó la tormenta que se ha ido formando a lo largo de los últimos años en Roma y que se convirtió en un diluvio de decisiones de la Iglesia católica.

Las mismas nubes que alguna vez iluminaron o ensombrecieron los pensamientos de Julio César, Mussolini o Karol Wojtyla han acompañado a Benedicto XVI, antes cardenal Ratzinger, hoy y siempre, el alemán serio destinado a hacer lo que hubiera que hacer en defensa de su interpretación de su fe y su Dios.


Ahora se trataba de los legionarios, de la única vez que México, como signo de los nuevos tiempos, había producido, dada su influencia por su importancia en la Iglesia católica, un movimiento que alcanzó una repercusión mundial.
La semana pasada todos lo que por una u otra causa estábamos en el Vaticano cuando esto llegaba a su final, vimos que el problema era poner un hasta dónde, y se sentía que ésta ha sido la más dura lucha a la que se han enfrentado en los últimos años los responsables de la Iglesia; hasta el propio hermano del Papa se ha visto inmiscuido en la pugna generalizada en que se convirtió la resolución del tema de los legionarios con la autodenuncia y las pruebas encontradas, con lo mejor, lo más exquisito, lo más secreto del Vaticano en relación al comportamiento de la santa madre Iglesia y la pederastia.

El planteamiento era muy sencillo, si todos estamos enfermos de lo mismo, en nombre de qué me podrás castigar. El desafío ha sido tan grande que hasta la salud de Benedicto XVI ha salido gravemente dañada.
El sábado en una decisión que por razones muy diferentes marcará, sin duda alguna, a su papado, Benedicto XVI hizo verdad aquello de si tu mano izquierda es la pecadora córtatela con la derecha.
En el Vaticano sólo preocupaba una cosa: hasta dónde se lleva la responsabilidad, ya no del muerto Maciel, que tanto daño hizo en vida y sigue haciendo en muerte, sino de todos los que le acompañaron. La Iglesia que si de algo tiene experiencia es de instruir procesos, recuérdese la Inquisición, ha decidido con su propia carne, con su propia sangre y su propia familia, cortar la gangrena del daño moral del abuso sobre los niños. Si eso es verdad, es un cambio que sin la menor duda llegará más pronto que tarde a México.

Al final sólo queda un recuerdo para todos los padres, madres y familiares que mandaron a sus hijos a las manos del monstruo pensando que se lo encargaban a un ángel. El daño es irreparable y marcará lo que será el futuro de la relación con un país tan estimado, tan potencial, tan importante como lo es México para la Iglesia católica. Por lo demás, aclaradas las complejidades del anterior papado con Maciel es de esperar el desencadenamiento de una serie de acciones legales no sólo fuera sino también en México contra los cómplices de Maciel, habiendo en la mesa billones de dólares de los legionarios.
Ratzinger con esta decisión prácticamente ha concluido su papado.

Por Antonio Navalón
Post RLB. Punto Politico.